Bukaneros en Granada

Desde antes del inicio del encuentro, se notaba que este no era un partido más. Los tres puntos eran vitales para ambos equipos y su lucha por salir de la zona del descenso. La afición rayista, sabedora de ello, se había desplazado en buen número hasta Granada. Entre ellos, no podíamos faltar nosotros, al igual que el gran trabajo de nuestro Komando Tifo, que lejos de conformarse con salirse en nuestro estadio, decidieron hacerlo también a cientos de kilómetros de nuestro barrio.

Empezando por las pancartas de viajes, estrenando una nueva con los ojos de nuestra calavera, realmente espectacular. Además, un estandarte de Alfon se situaría en el centro de nuestra pancarta, para acompañarnos allí donde nos desplacemos, como a él bien le gustaría poder hacer.

Si hablamos del tifo, las palabras sobran. El estudio de la grada en la que nos situaríamos posibilitó que la pancarta con el lema ‘si el camino es duro lo recorremos juntos’, acompañado de un pirata y el 1924, cuadrase a la perfección. El fondo era blanco con una franja roja en el medio, como la que formaríamos nosotros en la grada con un original y vistoso tifo de camisetas, que también incluían el diseño de la pancarta. Como se puede apreciar en las imágenes, el resultado y el colorido fue brutal.

Centrándonos ya en el partido, rayamos desde el principio a un gran nivel de animación. Apenas habíamos comenzado a cantar cuando llegaba el mazazo en forma de gol del Granada. Pero lejos de venirnos abajo, apretamos más si cabe, y en el césped nuestros jugadores conseguirían empatar al final de la primera parte.

La segunda, al igual que la primera, empezaría con otro gol del Granada, y con las mismas ganas por parte de los desplazados desde Vallekas, que hicieron alucinar hasta a la parroquia local. Palmeos, coreografías,… el espectáculo estaba en la grada. Y en el campo, la expulsión de Success nos sirvió de ayuda para poder apretar con gran intensidad durante el último tramo del partido. El gol de Zé Castro en el minuto 86 desató la locura en la zona visitante, haciéndonos soñar con que podríamos llevarnos los tres puntos. Finalmente, a pesar de haber puesto al Granada contra las cuerdas, nos faltó
esa chispa de suerte para tumbarlo en la lona.